De hecho hoy no sé como expresar el conjunto de emociones. Mi cabeza implosiona, y no hago nada más que escribir. Qué deprimente .
Me siento atrapado dentro de mí mismo, pero a la vez siento que tengo tanta libertad para vomitar en el rostro de quienes temo, de quienes amo.
Y es que cada día es un desafío, y la noche no sentencia sino incertidumbres sobre aquel día que sobreviene. Y esto es así, quizá es la personalidad, quizá es el mundo, quizá soy yo haciendome preguntas que si tienen algún sentido, o propósito, no deseo encontrarlo. Esto es divertido, y nuevamente deprimente. Prefiero ver algún sentido lógico a lo que escribo, pero no lo hallo. Quizá ya no puedo confiar, en fin.
Pero lo hallo, sí. Es un motivo, o menos que eso, una persona. Sin embargo, al ser persona es más que vida. Sí, quiero amarte, quiero enrrostrar en tu rostro aquella tristeza que desvela mi vida. Pero te odio, te odio tanto, que te amo aún más. Si te describo, te limito, y no es posible. Quizá mi boca y paladar puedan algún día articular tu escencia, quizá ocurra, cuando tu boca roze mi boca vacía, hueca y desgastada por el tiempo.
"En un beso sabrás todo lo que he callado".
2 comentarios:
Hola, me encanta el diseño de tu Blog y también tus escritos. Enlazaré tu blog al mío. Saludos y gracias por leer mi historia :D
Es interesante el ejercicio que haces al tratar de forma distinta y más íntimas, sentimientos tan importantes y necesarios en las personas como la soledad.
Muchas gracias por pasar a leer mi blog.
Publicar un comentario
Gracias por cualquier palabra, pues hace eco dentro de aquella cabeza cual yace hueca sobre mis hombros, sobre mi pecho vacío y aquella vida que iré dejando atrás .